Mujeres creadoras: su obra, su vida

Autoría Colectiva – GAMMA

Rosa Elvira Palomeque López

(Chordeleg, 1900- 1986) Artesana alfarera, reconocida en su pueblo como una de las más grandes representantes de este arte, inició su trabajo desde temprana edad puesto que sus padres se dedicaban a la misma actividad. Se cuenta entre sus principales obras la elaboración de un cáliz que fuera entregado al Papa Juan Pablo II durante su visita al Ecuador en 1985.

Su trabajo fue reconocido, los jarrones, los platos y demás artículos eran muy bien elaborados; decorados de figuras relacionadas con la naturaleza que tenían gran acogida porque expresaban su alegría y su respeto a la madre tierra.

El desafío más grande inició con la muerte de su esposo, este acontecimiento fue un reto considerando que ella hasta ese momento se encargaba sólo de la pintura de los objetos; esta pérdida le colocaba ante dos caminos: abandonar esta actividad o aventurarse en la fabricación y decoración de objetos; ella eligió el segundo, no tardó mucho en superar la meta que se planteó.

Con el paso del tiempo, Elvira Palomeque, fue reconocida en todo el país, recibiendo constantes visitas nacionales y extranjeras que disfrutaban mucho del ingenio y habilidad de esta importante ceramista, lo que contribuyó a que Chordeleg sea reconocida por esta actividad.

La recuerdan en su familia como una mujer que predicaba la alegría en el trabajo, el amor a cada pieza que elaborada, sus consejos a favor de la paz y en contra de la violencia, sus sabias palabras, y se deseo de continuar con sus actividades hasta morir.
Elvira Palomeque murió a sus 86 años de edad sin perder en ningún momento la alegría, dejando grandes legados a sus hijos y a su pueblo, sus obras se encuentran repartidas por muchos lugares, así como sus enseñanzas y su aporte al arte y a las culturas de nuestro país.

Cuáles con los signos contrahegemónicos

Contrario a las imposiciones de este sistema patriarcal, Elvira demostró al quedar viuda, que el trabajo que implica el uso de la fuerza no está destinado solamente a hombres jóvenes; por ello sin problema, incorporó a sus responsabilidades, la de trabajar en la elaboración de las piezas desde la preparación de la tierra, el moldeado en el torno y la pintura de cada obra, rompiendo con los estereotipos creados sobre el trabajo destinado socialmente para las mujeres.

Calendario Maya

Según el calendario maya (Tzolkin), cada día está regulado por un regente (nawal), conocido como cargador; esta es la energía encargada de protegernos, a la vez nos da elementos para catalizar mejor nuestras fuerzas y energías durante ese día.

Así mismo, al momento de nacer, cada persona tiene un cargador regente, que es el que estuvo activo ese día y le da pautas para encontrar su misión y realización en el universo.

En el siguiente enlace, se puede descargar “El libro de la Cuenta de los Nawales”, de Tito Medina, publicado por la Fundación CEDIM, de Guatemala.

Se encuentra en él cada fecha del calendario occidental con su correspondiente nawal, así como una explicación de cada nawal.}

La alimentación en el CEN

Autoría Colectiva – GAMMA

En el CEN, la alimentación es un elemento fundamental para apoyar los cambios y el proceso de sanación.
Intentamos construir menús alimenticios de acuerdo a las situaciones específicas de las personas y/o de los grupos.
En general, el menú es vegetariano, no utiliza alimentos que pueden dañar la salud, afectar el proceso de digestión o profundizar problemas comunes en la actualidad como: hipertensión, digestión lenta, gastritis, hígado graso, cálculos, entre los principales. Así, no utilizamos grasas saturadas, azúcar blanco, harina blanca, colorantes o preservantes.
Un elemento importante es que el proceso de digestión se vuelve lento y pesado mientras más alto nos encontremos sobre el nivel del mar. El CEN Garupamba se encuentra a 3.000 m.s.n.m. por lo que también hemos ido encontrando cuáles son aquellos ingredientes que son difíciles de digerir en la altura y los evitamos o utilizamos en mínima cantidad: ajo, cebolla, granos secos o maduros (porotos o frijoles, habas, lentejas), leche, grasas saturadas, col, brócoli, pepino, entre los principales.
La dieta andina está constituida principalmente por granos (leguminosas), entonces consumimos sí, granos tiernos, y los maduros los dejamos para el último día de cada grupo en el CEN, pues son deliciosos y muy nutritivos (contienen mucha proteína).
Por otra parte, se busca que el menú que se prepara cada día contribuya creativamente para cambiar los hábitos alimenticios en la vida cotidiana, entonces buscamos recetas con alimentos andinos que se están perdiendo, que son muy nutritivas y cuyo costo es bajo; así, las personas que vienen al CEN, pueden encontrar ideas para su alimentación cotidiana, una vez que regresen a sus lugares; la quinua, la cebada, los granos tiernos, diversas verduras, las papas, el ají con tomate de árbol, son alimentos que nunca faltan en el menú del CEN.
En el CEN hemos sembrado y cosechado: papas de diversos tipos, ocas, mashuas, mellocos, habas, arvejas, maíz, verduras (rábano, lechuga, acelga, cebolla). En pequeños espacios dentro del bosque tenemos huertos orgánicos en donde probamos diversos cultivos con el fin de adaptar algunas especies a la altura y conservar otras, como las habas y las papas, que crecen bellas y fuertes a los 3.000 m. s.n.m. Esperamos en el futuro diversificar las semillas y productos que crecen allí.
En cuanto a las bebidas, en el bosque del páramo existen infinidad de plantas medicinales por lo que hacemos agüitas que también apoyan para una estadía confortable: cola de caballo, gañal, shilpalpal, payana, son las propias del cerro; pero también hemos sembrado: manzanilla, cedrón, romero, menta, hierba buena. De acuerdo a la ocasión, a la temperatura ambiental y a los ánimos, se hacen las agüitas y quienes desean las endulzan con panela o miel.
Unos pocos panales nos han regalado una miel deliciosa con sabor a flores del bosque, el clima frío y la altura hacen difícil la ampliación de colmenas, pero, ahí están las abejas, trabajando incansablemente; entonces, en algunas épocas del año, podemos probar este manjar.
Los desayunos son la principal comida del día, frutas de la sierra y de la costa de temporada; yogourt natural, miel de abeja o de caña, granola hecha en casa (germen de trigo, ajonjolí, avena entera, linaza, pepa de sambo, pasas, nueces entre otros, son los ingredientes de esta granola), leche de soya, pan integral horneado en leña, mermeladas de diversas frutas, y alguna receta ecuatoriana para acompañar con un poco de sal: tamales, chihuiles, chumales o tigrillo. Desayunar en calma, contemplando las montañas y las nubes bajas, sabiendo que estamos alimentando nuestro cuerpo muy nutritivamente, es un verdadero regalo.
Las personas que nos visitan no extrañan para nada las carnes o las grasas, saben que el tiempo que estén en el CEN, será aprovechado para hacer una pausa en todo sentido y entonces, no hay sacrificio sino aprendizaje.

Estamos preparando un recetario con plantas medicinales del bosque y otro con las recetas que más gustan a quienes nos visitan. Encuéntrelos próximamente.